La energía es cada vez más costosa y los aparatos que generan calor son los más caros de mantener tanto en viviendas como negocios. En muchos casos, la solución puede pasar por instalar energía fotovoltaica, pero eso no siempre es rentable ni fácilmente amortizable. A veces, tampoco disponemos de suficiente espacio para su instalación.
En estos casos, apostar por un sistema solar térmico supone siempre una buena decisión de cara al ahorro energético que se adecua a cualquier entorno y donde la inversión es rápidamente amortizada.
Estos sistemas aprovechan la energía solar exclusivamente para calentar agua destinada a consumo propio, sea para viviendas o industrias, sustituyendo a los termos eléctricos que suponen un gasto continuo de energía.
Instalamos y mantenemos sistemas solares térmicos tando de termosifón (Donde el depósito está en la cubierta de la vivienda) como forzado (Donde el depósito está dentro de la vivienda).
Estos sistemas, además de suponer un considerable ahorro para el usuario final, pueden funcionar de manera independiente o como soporte de apoyo energético, combinando ambos sistemas para garantiza siempre el sumistro de agua caliente.
La instalación solar térmica es una alternativa adecuada para aquellos que no rentabilizarían una instalación fotovoltaica o bien aquellos usuarios que por cuestiones operativas o de espacio no requieran instalaciones fotovoltaicas pero busquen un ahorro en su factura eléctrica.
Siempre es necesario realizar una inspección previa del lugar de instalación para ofrecer un presupuesto ajustado a las necesidades de cada cliente. Somos especialistas tanto en la instalación como en el mantenimiento de sistemas solares térmicos.